Mi amigo Morfeo me ha puesto a prueba nuevamente, esta vez el escenario y los protagonistas eran otros, pero esta vez me dejo llegar hasta el final.
Un noche (podría ser la noche de un sábado cualquiera), mi pana y yo en nuestro coche discutíamos que hacer y a donde ir, yo no estaba muy animada pero dentro de mi sabía que mi cuerpo quería marcha, locura y sobre todo sexo. El escenario era conocido, era un lugar entre Madrid y Caracas o ambos lugares (esto es posible solo en sueños), parecía un aeropuerto (se parecía más al aeropuerto de Caracas que Barajas), entrabamos al mismo cuando visualizamos una pareja, ella guapisima,alta, esbelta, con una larga melena que sabía muy bien como mover, él un hombre de estatura mediana, camiseta y vaquero ceñidos dejaban ver un cuerpo impresionante, su pelo era muy corto (parecía militar por el corte de pelo), ambos se cruzaron en nuestro camino sin apenas mirarnos (aparentemente), el pana en un alarde de vidente me dice "con esa pareja vamos a estar esta noche", yo lo mire con incredulidad mientras continuamos bajando por unas escaleras mecánicas.
Al final de la escalera había una maquina expendedora de refrescos, había una larga fila de compradores, el pana se coloca en la fila para comprarse una coca-cola, cuando aparece de la nada la pareja guapa, él se coloca detrás de mí y me susurra al oído "te atrape" mientras me estrechaba fuertemente contra su cuerpo, mientras ella susurraba algo al oído del pana, acto seguido estábamos los cuatro en la habitación de un hotel (también me resultaba conocido, o se parecía a uno que hay cerca del aeropuerto de Caracas), besandonos con mucha pasión, él me desvestía desesperadamente (malditos pantalones que no salían con facilidad), ellos (el pana y la otra chica) ya estaban desnudos jugando por su lado.
Sus besos eran largos y profundos, mi cuerpo caliente solo buscaba sus caricias, las cuales eran intensas y suaves a la vez, yo le suplicaba que no parase, hasta que después de un buen calentamiento entro dentro de mi con suavidad para ir subiendo de intensidad poco a poco, era justamente como lo deseaba, verlo encima de mí era hermoso, su cuerpo era perfecto, sus labios, su cara, todo él era perfecto, era como un ángel o tal vez mejor como un demonio, un hermoso demonio que me poseía una y otra vez, no paramos hasta sentirnos agotados, nosotros estábamos en la alfombra, mientras el pana y su chica estaban en la cama (creo que tengo una obsesión por hacer el amor en la alfombras!).
Al finalizar el intercambio nuestras parejas nos esperaban, los cuatro habíamos pasado un gran momento y lo mejor de todo es que no nos conocíamos para nada, eramos cuatro perfectos extraños, que solo querían disfrutar de buen sexo sin líos, sin ataduras, luego al terminar la fantasía se termino el sueño con la luz de la mañana, el pana y yo habíamos disfrutado mucho, ambos al mismo tiempo y eso es lo más maravilloso de este sueño.
Morfeo me conoces tan bien, ¿como adivinaste que era esto lo que necesitaba?, gracias Morfeo por darme una noche de ensueño y dejar que mi mente volará sin limites.
Hasta luego,
2 comentarios:
Mmmm... me alegro mucho de que Morfeo te haga esos regalos tan especiales.
Ya sabes lo que dicen: Ten cuidado con lo que sueñas, puede hacerse realidad.
Un gran beso.
Espero se haga realidad, me pone mucho eso de intercambiar con extraños, quizas no fue un sueño sino una premonición, un beso futurista
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