Yo Infiel

Con el tiempo he comprendido y he aceptado mi propia naturaleza y reconozco a estas alturas de mi vida que siempre he sido infiel, me he torturado por años, tratando de negarlo, pero la verdad es que nunca me he atado totalmente a una relación, he creído muy en mis adentros que es natural que me gusten otras personas a pesar de tener una relación, siempre me he excusado inculpando al que era mi pareja de turno, diciendome a misma que este nunca era lo suficiente "perfecto" para merecer mi fidelidad absoluta, por ello me permitia coquetear, filtrear e incluso ir mas allá con otros hombres mientras mantenía una relación digamos "seria" con otro hombre, irónicamente a lo que si he sido siempre fiel es a mis ideales, soy una mujer de fuertes convicciones.

Curiosamente, y apesar de haber sido infiel en más de una ocasión, nunca nadie me había sido infiel,al menos que yo lo supiera, creo que egoistamente no lo hubiera soportado, hasta que me encontré con la horma de mi zapato, y es allí después de que finalmente encuentro a alguien a quien no me siento capaz de ser infiel (aunque hubiese mas de una tentación en el camino), cuando entonces conozco la otra cara de la moneda: paso a ser la víctima y dejo de ser el victimario por primera vez.

Contrariamente a lo que se pueda pensar, la infidelidad desde el punto de vista de víctima me ha enseñado muchas cosas, después del dolor inicial, de todo el sufrimiento y de la casi devastación total de mi vida conyugal, he aprendido y aceptado que la infidelidad es parte de la naturaleza humana y es en este punto que descubro las ventajas del mundo liberal.

Creo que todos tenemos un depredador y conquistador dentro, el cual disfruta conquistando y reinventandose para ser mas atractivo, y que mejor que hacerlo con libertad, sabiendo de antemano que no hieres a tu pareja, que mejor regalo puede darte tu pareja que la oportunidad de ser infiel sin en realidad serlo, sin sentimientos de culpa y sin ser criminalizado, ya que como se versa en la biblia: " quien este libre de pecado que tire la primera piedra".

Desde que conozco el mundo liberal soy mas yo misma, puedo dar rienda suelta a mis instintos mas básicos y todo esto sin dejar de amar a mi pareja, a mi compañero de vida y mejor complice, en pocas palabras, he complementado mi vida, dejando que la infidelidad pase de ser casi un delito a ser entendida como parte de mi propia naturaleza humana.

Hasta luego,